Wanda Nara volvió a ser noticia, pero esta vez no por sus romances, sino por una movida digital que sorprendió hasta a sus fans más fieles. En medio del escándalo interminable con Mauro Icardi y la China Suárez, la empresaria decidió cambiar su foto y nombre de usuario en X y el resultado fue inmediato: perdió su verificación.
Hasta hace poco, Wanda mantenía intacto su perfil con una imagen tomada en una producción laboral y el clásico nombre “Wan”, que la acompañaba desde los tiempos en los que se peleó con Maxi López. Pero algo cambió, tal vez cansada del drama, eligió una selfie reciente en la nieve y un nombre con mucha actitud: “Bad Bitch”.
El gesto, por supuesto, no pasó desapercibido. Muchos lo leyeron como una respuesta directa a la flamante relación entre Icardi y la China, que no para de generar roces públicos. Y mientras Wanda reformula su imagen virtual, Icardi sigue firme en su estrategia de escraches silenciosos y likes sospechosos.
Pero eso no fue todo: al perder la verificación, su nueva identidad virtual quedó “desnuda” ante sus seguidores, lo que generó confusión, memes y hasta teorías conspirativas. La decisión coincidió con una tarde explosiva en redes. Luego de que un periodista publicara información que la incomodó, Wanda reaccionó con todo.
Habló de audios, chats, cámaras de seguridad y hasta de un supuesto plan macabro que involucraría a menores. Sin filtro, apuntó contra todos: Icardi a quien le hizo unos polémicos stickers burlándose de él, la prensa, y hasta la pareja actual del futbolista y sus mensajes dejaron en claro que está lejos de calmarse.
En sus historias de Instagram, Wanda no solo dejó ver su enojo, sino también su hartazgo. Publicó capturas, lanzó indirectas y prometió hablar con pruebas: “Tengo todo guardado”, advirtió, dejando entrever que hay mucho más por salir a la luz.
“Yo lo hago por amor a mis hijas, él por cumplir su amenaza, el periodista por fama y ella se denigra por dinero”, escribió furiosa. El cambio de nombre, entonces, no fue solo una jugada estética: fue un mensaje. En plena guerra pública, Wanda se muestra cada vez más determinada a no dejar pasar ni una.